Fernando QuirogaAndrea Torres tiene nada más que 26 años. Es Coach experta en Bioneuroemoción, líder y empresaria. Colombiana de origen, pero ciudadana del mundo por decisión, su impecable trabajo a llegado a Miami para transformar sistemáticamente la vida de todos y cada uno quienes decidan abrazar la fecundidad de las oportunidades. Tirando por tierra fundamentos tradicionales, Andrea aborda el más grande los desafíos en el camino de la autorrealización; convertir la senda de nuestra vida en un dechado de dondes y aciertos ilimitados. Tendencia Miami, se comunicó con ella, en virtud de su gran llegada a nuestros lectores.
Tu nombre es sinónimo de prestigio y autogestión. Cuéntanos como fue tu despertar, tu camino…
Me gradué cómo profesional en finanzas y negocios internacionales. Estaba ejerciendo mi carrera durante cuatro años, y en ese lapso, comencé a sentir que había algo mucho más grande que podía hacer, algo más productivo que estar sentada en un escritorio ocho horas durante seis días a la semana. Decidí empezar a leer, ir a seminarios de crecimiento personal, finanzas y mentalidad; y justo ahí, descubrí que mi propósito de vida iba ligado al dar, al enseñar y liderar.
Fue entonces cuando renuncié a mi empleo y me di la oportunidad de ingresar a una red de mercado, donde tuve la bendición de tener una organización de más de dos mil personas y alcanzar cifras mensuales de más de 60.000 usd. Durante este proceso me formé cómo Coach Ontológico, hice un Diplomado en Neurociencias y un Diplomado en Bioneuroemoción, entre otros enfocados en ventas y liderazgo.
Decidí crear una empresa de crecimiento personal y aliarme con el conocimiento que tiene mi esposo en mercados financieros, para así fusionar en un solo lugar la oportunidad de transformar la vida de cada persona a nivel mental, emocional, personal y financiera, dándoles las herramientas necesarias para llevar su vida a niveles nunca antes vistos.
Por qué crees que destacas en tus mensajes superadores?
Creo que mi experiencia de salir adelante ha marcado mis procederes. Experimenté una quiebra de más de 200.000 usd y vivir un declive emocional donde no encontraba una salida. Y en el momento de mayor inflexión haber conocido a Dios y experimentar su gracia en mi vida, fue fundamental.
Por eso, decidí ayudar a otros. Abrí una academia de crecimiento personal y mercados financieros, donde no le cobramos a nadie ninguna membresía por ser parte. El sentido altruísta se apoya en mi historia, en mis momentos más difíciles. Además, a las personas que se nos acercan, les enseñamos cómo pueden empezar a dar sus primeros pasos cómo inversionistas mientras viven una transformación desde el ser-hacer-tener.
Nuestra propuesta de valor es tener una red de soporte emocional, acompañamiento, procesos de inducción y guías donde formamos a cada persona de manera íntegra con un proceso personal y financiero.
Y el espacio educativo fue fundamental…
Sí. Elegir este camino de crear la entidad que entrega herramientas de transformación personal y financiera, se ha dado a través de toda la experiencia que he adquirido durante más de siete años, donde he podido conocer y saber con certeza, cuáles son las verdaderas skills y procesos que cada persona debe llevar para tener el resultado que tanto anhela…
En nuestra academia mitigamos el “ensayo y error” de cada persona, ya que proveemos un paso a paso que con certeza, una vez de aplicarlo; llega el resultado.
Si tuvieras que enumerar tus virtudes, cuales serían estas?
1. Tener a Dios en mi corazón
2. Reconocer mi propósito de vida, ir por él y ponerlo al servicio de los demás.
3. Crear un lugar seguro de construcción y materialización para mis estudiantes
4. Haber transformado la vida de más de tres mil personas
5. Vivir a través de mis valores
6. Construir la vida de mis sueños y enseñarle a otros cómo pueden llegar a lograrlo!
Y si te pido cinco tips que le darías a la gente que recién está iniciándose, ¿cuáles serían estos?
1. Dios siempre dentro de la ecuación
2. Tener una visión clara y concisa de lo que quiero ser, lograr y obtener.
3. Crear un plan de acción detallado. Hacerlo TODOS LOS DÍAS
5. Educarte y escuchar personas que ya están donde te gustaría estar
¿Dónde te ves en cinco años?
Seguir viviendo a través de la gracia de Dios en mi vida, e Impactando la vida de más de un millón de personas. Así será.